Si te hago más fácil caminar Agárrate fuerte sin pensar Si tú vas despacio, yo voy detrás Lograrlo si cuesta aún es más especial Si encuentro la forma de sumar Quizá compartiendo por probar Regala ilusión para hacerlo real Cuando a alguien le falta alguien tiene de más Satisfacer a mi alma es el precio a pagar Si puedo cuidarte te voy a cuidar Hacer feliz es tan grande que puede gustar Si quieres mi mano te la voy a dar Si buscas mi apoyo lo tendrás Si puedo estar cerca me verás Sintiendo y luchando no tengo rival Donando mi vida ya soy inmortal Cuando he aprendido a valorar Y lleno un vacío que llenar Si no hay diferencias, puedo aguantar Cuando alguien no tiene ya nada es igual Satisfacer a mi alma es el precio a pagar Si puedo cuidarte te voy a cuidar Hacer feliz es tan grande que puede gustar Si quieres mi mano te la voy a dar Nada puede fallar, si te puedo ayudar.
“Ayudar a quien necesita”
La solidaridad es un valor que implica la ayuda desinteresada de un ser a otro tras conocer que este último tiene una necesidad. Resulta de gran utilidad para intentar que alguien pueda abandonar una situación adversa y, por tanto, pueda sentirse mejor. La solidaridad no tiene por qué practicarse con bienes o dinero. A veces, cosas tan inmateriales e importantes como la compañía y el cariño pueden ser verdaderos tesoros para quien los echa en falta. Evidentemente, en el mundo surgen dificultades constantemente y es imposible que uno o unos pocos seres humanos puedan abarcarlas todas. Pero tener activada la actitud solidaria de cada cual puede servir para conseguir ocupar un radio de acción, que sumado al de otros tantos puede tener un gran poder. Toda concienciación por colaborar con causas es importante. Y aunque a las afueras de nuestro entorno hay mucho por hacer, este valor se puede llevar a la práctica cada día ayudando, dentro de nuestras posibilidades, a las personas que tenemos cerca. Es cuestión de estar atentos para aplicar nuestra solidaridad y así servir de apoyo..